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'Ese Mayordomo, Tan Hábil'その執事、有能 Sono Shitsuji, Yūnō? es el capítulo 1 del manga Kuroshitsuji.

Trama

Dentro de un bosque cubierto de rocío, en las cercanías de Londres, se encuentra la distinguida Mansión Phantomhive. Los eventos matutinos dentro de esta comienzan con una temprana taza de té.

El mayordomo, Sebastian Michaelis, sirve el desayuno a su joven amo entretanto este continúa en la cama. Posteriormente, Ciel Phantomhive despierta y pregunta por la agenda del día, mientras es vestido por Sebastian.

Más tarde, en el jardín de la mansión, Sebastian se enfrenta a un hombre experto en artes marciales, al cual logra derrotar fácilmente. Al preguntarle por su identidad, Sebastian responde que es el mayordomo de la casa Phantomhive, y que por lo tanto debía ser capaz de superar hasta su más poderosa técnica. Los sirvientes de la mansión quedan asombrados ante la fuerza de Sebastian, no obstante el cabecilla de la familia permanece molesto, pues esperaba verlo ser derrotado ese día. Sebastian se disculpa con una sonrisa, y Ciel le ofrece una bebida por su buen trabajo. Tras terminar, Sebastian se voltea hacia el resto de los sirvientes y les llama la atención por estar de vagos en lugar de trabajar. Asustados, estos huyen a realizar sus labores.

Ciel, entonces, le comenta que recibió una llamada de Chlaus desde Italia, y le ordena seguirlo. Ya en su despacho, Ciel le comenta que Chlaus vendrá directamente a Inglaterra con una considerable cantidad de mercancía, por lo que las negociaciones se llevarían a cabo allí mismo a las seis en punto. Al preguntarle si sabe a lo que se refiere, Sebastian responde que le ofrecerá la mejor hospitalidad de la casa, y cambia completamente de tema para preguntarle qué era la "limonada que había tomado antes, pues su taquicardia se rehusaba a contenerse. Ciel le dice que se trataba de la bebida sin adulterar de Tanaka. Molesto, Sebastian se retira a hacer los preparativos.

Tras, entre otras cosas, poner la mesa y arreglar el jardín, Sebastian se dispone a preparar la cena. En ese momento este es interrumpido por el llamado de su joven amo, y abandona la cocina.Baldroy, Finnian y Mey-Rin se dan cuenta de las actividades del mayordomo y descubren que se trata de una ocasión especial, por lo que deciden aprovechar la oportunidad para demostrarle a Sebastian sus habilidades. Mientras Sebastian lidiaba con Ciel respecto a prepararle un bocado, los sirvientes logran destruir de alguna forma lo que Sebastian había limpiado con anterioridad.

Una vez de regreso, el mayordomo se enoja con estos por su ineficiencia, pero lo deja pasar y se pone a pensar en una solución. Ya con el tiempo encima, al ver la bebida de Tanaka, a Sebastian se le ocurre una idea, por lo que le pide ayuda a los sirvientes.

A las seis en punto, Chlaus llega a la mansión y saluda a Ciel con entusiasmo, no obstante el Phantomhive permanece inexpresivo y lo conduce al interior. Ya dentro, los sirvientes y Sebastian le dan la bienvenida. Chlaus se sorprende por lo hermosa que se encuentra la mansión, así como por los nuevos rostros en ella, refiriéndose a los sirvientes. Sebastian le pide que se dirija al patio, donde ha preparado la cena por órdenes de su maestro.

El patio, decorado al estilo japonés con un jardín de rocas, dislumbra a Chlaus, quien le entrega a Ciel la "mercancía", un videojuego. Chlaus hace énfasis en la posición del Phantomhive como el mejor desarrollador de juegos a tan corta edad (12 años), para luego ser interrumpido por Sebastian, quien le sirve "Donburi. Chlaus agradece por el platillo típico, ya que su paladar estaba cansado de la comida refinada. Es entonces cuando es el turno de Mey-Rin de servir el vino, pero esta se encuentra demasiado nerviosa como para hacerlo y lo derrama sobre el mantel, arruinando la perfecta cena.

En cuestión de un segundo, Sebastian hala el mantel de la mesa de tal forma que logra retirarlo sin tirar nada, ante la mirada atónita de su amo y de los sirvientes. Chlaus voltea para darse cuenta de que el mantel fue retirado, sin embargo Ciel comenta que había una pequeña mancha, y que eso no debería importunar su cena.

Chlaus felicita a Ciel por su habilidoso mayordomo. Este responde que tiene que ser así, pues está en la casa de los Phantomhive. Tras decirle que es muy estricto de su parte, Ciel comenta que no hay mejores postres que los de Sebastian. En ese momento, las flores florecen y Sebastian se acerca a ellos con el postre, lamentando la demora.

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Plantilla:Volumen 01

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